AGA - Apicultors Gironins Associats
A los 16 días de puesto el huevo, la metamorfosis llega a su fin y el insecto girando sobre el mismo, con sus mandíbulas corta por encima de la tapa u opérculo y sale de su celda por la parte inferior. La primera reina que eclosiona es atendida y limpiada por las obreras; enseguida busca las otras celdas reales para destruirlas mediante una horadación lateral seguida de su aguijón, y así se constituye en la única hembra completa de la familia. Cuando dos o más reinas emergen simultáneamente, traban combate hasta que solo queda la vencedora.
Aproximadamente una semana después de salir de su celda, la reina efectúa uno o dos vuelos de orientación que duran entre 2 y 3 minutos, después los vuelos de fertilización, con una duración promedio de 15 minutos buscando las zonas de congregación de zánganos en vuelo y efectúa la cópula con varios de ellos, 10 en promedio.
Dos o tres días después de la última cópula la reina pone el primer huevo, no vuelve a salir de su colmena, excepto cuando enjambra para formar una nueva colonia.
Como ya es conocido, la reina es la única hembra sexualmente apta para la reproducción, a diferencia de las obreras que tienen su aparato reproductor atrofiado. Esa diferencia está determinada por la alimentación que reciben las larvas durante su desarrollo, según sean destinadas a ser obreras o reinas, ya que cada huevecillo fecundado puede convertirse en una u otra.
Las larvas destinadas a ser reinas, son alimentadas con jalea real hasta que sus celdas son opéculadas, las larvas destinadas a ser obreras reciben después del tercer día un alimento de composición diferente en proteínas y grasas, desde el final del tercer día el desarrollo de los ovarios de las larvas de obrera sufre un retraso considerable.
Durante su estado larvario, las reinas reciben hasta 2,000 comidas diarias suministradas por abejas generalmente de 3 hasta 15 días de edad.
Las abejas jóvenes están habilitadas para alimentar a la cría, debido al gran desarrollo de sus glándulas hipofaríngeas que producen la jalea real. Estas siguen funcionando en las abejas mayores que pueden ayudar ha alimentar las larvas en caso de emergencia, pero no con el mismo éxito. Este es un factor de importancia para la cría de reinas, ya que debe considerarse que son indispensables las abejas jóvenes para criar reinas de buena calidad.
El momento preciso a partir del cual se obtiene solo una reina, solo una obrera no está definido, se conoce que dependiendo de la alimentación con jalea real y de las horas transcurridas para elegir la larva que será la futura reina, se puede tener una gama de individuos de morfología variada, desde la obrera hasta la reina, pasando por formas intermedias a las que se les llama ínter castas, por lo tanto, para iniciar la cría de reinas se deben seleccionar larvas muy pequeñas a fin de obtenerlas de buena calidad desde el punto de vista fisiológico.
La conservación y multiplicación de la especie determina la producción de reinas, las abejas obreras jóvenes inician la crianza de reinas debido a la ausencia o disminución de las ectohormonas o feromonas de la reina, que en condiciones naturales ocurre en los siguientes casos:
a) Orfandad.
b) Reemplazo.
c) Enjambrazón.
Si la colonia va a generar varios enjambres secundarios, las abejas protegen a las celdas reales, para que no sean destruidas por la primera reina que eclosione, la reina madre con un grupo de abejas forma el primer enjambre y sale de la colmena; posteriormente saldrán los otros con menor número de abejas encabezados por reinas vírgenes en este caso también las celdas reales se construyen en los bordes de los panales. Nota: Las opiniones expresadas por el autor, no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción AGA Fuente: sagarpa.gob.mx |
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